Las ventajas de abrir esta área vital de la casa son tantas que te sorprenderá cuántas mejoras puedes experimentar a nivel físico y energético con una opción fresca y despejada. Acompáñanos a explorar y descubrir todo lo que debes saber con respecto a las cocinas abiertas para compartir.
Ganar en amplitud y luz, haciendo que tu vivienda parezca más espaciosa, son solo dos de los beneficios iniciales que puedes disfrutar con una cocina abierta. Para lograr este tipo de distribución no es necesario incurrir en gastos desmedidos que alteren tus finanzas o tu vida diaria. Simplemente, recurre a una buena planificación que contemple las necesidades familiares, y elimina las paredes, tabiques o muebles divisorios que estorben. Esto generará un mayor flujo de iluminación natural continua en los ambientes que deseas integrar.
Una vez abierto el espacio y eliminados muros y obstáculos, es fundamental restablecer, e inclusive mejorar, la capacidad de almacenamiento que dispones. Recuerda que has suprimido algunas superficies, muebles o repisas, y la manera de compensar es a través de la instalación de nuevos armarios, una isla, península o un desayunador, con compartimentos para almacenar elegantemente y fuera de la vista.
Siempre que las dimensiones lo permitan, la opción de añadir una isla central es la más recomendable, ya que amplía el área de trabajo, permitiendo mayor acceso y movilidad por sus cuatro lados. Después de todo, diariamente pasamos mucho tiempo en la cocina, por lo que debemos asegurarnos que no solo sea hermosa, sino también que brinde comodidad y funcionalidad.
El plano abierto es una manera de distribución con mayor amplitud y vinculación, que conecta esencialmente la cocina con el comedor, aunque igualmente puede incluir la sala de estar. Por tanto, para lograr unificar estas áreas te recomendamos elegir una paleta de colores comunes, quizá sobre una base de neutros como el beige o gris, que asimismo incorpore materiales, elementos y acabados similares sin perder la identidad de cada sector.
Parte del atractivo central de este tipo de cocina es que no solo constituye un lugar destinado a la preparación de comidas, sino que al mismo tiempo es un centro de encuentro familiar, donde se conversa, comparte y hasta puedes trabajar. Es por ello que adicionalmente cada sector debería contar con iluminación tanto ambiental como de trabajo, dependiendo de la tarea que allí se realice. Así, la isla central, el área de cocción o la encimera contarán con luz puntual.
Un punto a recordar es que los nuevos pisos que elijas pueden integrar o delimitar los ambientes escogidos. Si deseas unir, elige un tipo de piso resistente a las sustancias abrasivas de uso común en el hogar, por ejemplo la cerámica, que puedas extender a toda el área de cocina – comedor. Si, por el contrario, buscas definir cada sector, entonces escoge materiales más delicados como el mármol o la madera para diferenciar el comedor.
En cuanto a la propagación de humo y olores desde la cocina, consideramos un must mantener un aseo diario profundo, y sobre todo contar con sistemas de extracción de la mayor eficiencia. En la actualidad dispones, por ejemplo, de un sin número de placas de cocción con extractor incorporado, en sustitución de la tradicional campana extractora, que mantiene el espacio despejado y organizado.
Nuestra recomendación final es complementar tu nueva cocina con electrodomésticos modernos, eficientes y silenciosos, que no perturben la tranquilidad del hogar.
Esperamos que ésta entrega te haya animado a considerar las cocinas abiertas para compartir como una verdadera alternativa para remodelar tu hogar.